Charles Dickens escribió sobre la epidemia de difteria en 1856 (y todo suena muy familiar)

By febrero 11, 2021 febrero 17th, 2021 Blog

Una enfermedad nunca antes vista está causando muertes en todo el mundo. Las autoridades tratan de evitar el pánico, los viajes se han visto interrumpidos y hay noticias falsas apareciendo por doquier. Parece una descripción exacta de lo acontecido a inicios del 2020 a causa de la covid-19, pero no.

Se trata de una carta que Charles Dickens escribió en agosto de 1856 a Sir Joseph Olliffe, un médico de la Embajada Inglesa en París, en la que le pregunta sobre el brote de difteria en Boulogne-sur-Mer, en la costa norte de Francia. A Dickens debieron causarle preocupación las noticias sobre lo que entonces era llamado el  “dolor de garganta de Boulogne”, al grado de mandar a sus hijos de vuelta a Inglaterra para que estuvieran seguros.

Las autoridades médicas francesas minimizaron la expansión de la desconocida enfermedad, que por desgracia coincidió con un brote de tifus que acabó con la vida de un amigo de Dickens, el viñetista y periodista Gilbert Abbott à Beckett, quien estaba de vacaciones en Boulogne. Y solo dos días antes de que Gilbert falleciera, su hijo Walter murió de difteria. El cruce de ambas enfermedades y el desconocimiento agudizó más la crisis de información que se estaba viviendo.

La expansión de la enfermedad en Francia e Inglaterra hizo que las investigaciones científicas se aceleraran y para 1860 se tuviera un conocimiento mayor sobre el origen, los síntomas y el modo de transmisión de la enfermedad. Se encontró que la extraña enfermedad era difteria, cuyo nombre científico fue acuñado por Pierre Bretonneau, y se refería a la membrana de aspecto correoso que se forma en la laringe como consecuencia de una infección bacteriana. La enfermedad era grave, contagiosa y a menudo fatal. Se extendía de la misma forma que la covid-19, por contacto directo o por microgotas respiratorias.

A diferencia de nuestros días, en los que usamos las redes sociales para enterarnos de acontecimientos mundiales casi de inmediato, en aquellos días el uso de cartas y publicaciones en los periódicos fue el medio por excelencia para informar y también para desinformar. Y el papel de Dickens era fundamental, ya que con su labor de periodista tenía gran cantidad de medios para difundir información.

Hasta 1920 no se desarrolló una vacuna contra la difteria, y fue hasta 1940 cuando los distintos países empezaron a inmunizar a los niños de forma gratuita y a escala nacional. Gracias al poder de las vacunas y al incansable trabajo de la industria de investigación biofarmacéutica, venceremos a la covid-19, tal como la humanidad logró dejar atrás a la difteria.

DATO: En México el último caso de difteria fue confirmado en Michoacán en 1991.