Un nuevo informe de Vital Transformation muestra que el desarrollo de nuevos medicamentos se basa en la experiencia y la inversión del sector privado.
Las empresas biofarmacéuticas están en el corazón del ecosistema de investigación y desarrollo que desarrolla medicamentos innovadores. Para este ecosistema es fundamental la relación de trabajo entre la industria y las agencias gubernamentales como los institutos nacionales de salud, los centros médicos académicos y los sitios de investigación para promover la traducción de la investigación básica en productos médicos importantes.
Vital Transformation analizó las subvenciones de investigación de los institutos nacionales de salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés) otorgadas en el año fiscal 2000, identificando aquellas asociadas con ensayos clínicos y medicamentos aprobados en 2020, y cuantificando las inversiones públicas y privadas realizadas para cada una. Los hallazgos demuestran que el desarrollo continuo de medicamentos nuevos que salvan y mejoran la vida no sería posible sin la sólida inversión y la asunción del riesgo de inversión, la experiencia científica y las capacidades de desarrollo y fabricación de las empresas de investigación biofarmacéutica.
Los hallazgos clave del informe incluyen:
- De 23,230 subvenciones de los NIH emitidas en el año, 18 estuvieron asociados a medicamentos aprobados por la FDA para 2020.
- De esos 18 medicamentos, ninguno hubiera alcanzado la aprobación de la FDA sin la inversión privada que significó promover el desarrollo de estos medicamentos.
- La inversión del sector privado para los 18 medicamentos aprobados superó la financiación de los NIH. La inversión del sector privado ascendió a 44,2 mil millones de dólares en comparación con 670 millones de dólares en financiamiento de los NIH.
El papel único de la industria biofarmacéutica en el ecosistema de investigación es utilizar su experiencia, científica e industrial, para asumir los riesgos necesarios para desarrollar y traducir la investigación científica básica en tratamientos seguros y efectivos que puedan estar disponibles para las y los pacientes.
La investigación financiada con fondos públicos cataliza la inversión del sector privado. O, como lo fraseo con acertado tino la oficina de Presupuesto del Congreso de EUA, la investigación del sector público y la investigación y desarrollo del sector privado «son complementos, no sustitutos«.